EL TEMPORAL / RESTO DE LA PENINSULA
El temporal arrasa la Península, de Huelva a los Pirineos
Dejó a su paso 10 muertos en Portugal, cortes de tráfico y ferrocarril, apagones, árboles arrancados de cuajo, nieve y barcos embarrancados
Mientras en Extremadura y la vecina región portuguesa del Alentejo el temporal traía la tragedia, el resto de España padeció sus efectos sin que se produjeran víctimas mortales. La mayor parte del país fue barrido por vientos que se acercaron a los 90 kilómetros por hora y se ensañaron con árboles, postes, carteles y casas. Las intensas lluvias hicieron crecer peligrosamente varios ríos y convirtieron las calles en improvisados arroyos. La red viaria sufrió los cortes de 29 carreteras, y ocho puertos de montaña cubiertos de nieve exigieron cadenas para circular.
En Portugal, la región del Alentejo fue asolada por la lluvia y el viento. A su paso, el temporal dejó 10 muertos, dos desaparecidos y 25 heridos. La tempestad aisló localidades, destruyó numerosas casas, cortó carreteras, interrumpió las líneas ferroviarias y obligó a la evacuación de decenas de personas. Las localidades más afectadas fueron las de Carregueiro, Sobral da Adiza, Garvao y Funcheira, donde se registraron las víctimas mortales, entre ellas dos niños.
Andalucía, las dos Castillas y Valencia sufrieron la peor parte del temporal en España, que también se hizo sentir en Cataluña, sobre todo por la tarde. En Tarragona, el fuerte viento de levante que sopló en el Delta del Ebro hizo que el mar invadiera las zonas de arrozales más próximas a la línea marítima, provocó inudaciones en las masías e hizo desaparecer la playa de Eucaliptus, en el término municipal de Amposta. Desde Barcelona se podía ayer navegar en los buques de Transmediterránea hasta Mallorca, pero el tráfico marítimo entre las islas estuvo suspendido. Un poco más al norte, en los Pirineos, la tormenta cobró tal magnitud, que ni siquiera salieron los pastores.
Antes, el temporal había atravesado Castilla y León. En la provincia de Guadalajara, la lluvia y los vientos de hasta 85 kilómetros por hora provocaron el corte de 13 carreteras secundarias, principalmente por la caída de árboles. El temporal también provocó cortes de luz y teléfono en al menos cuatro localidades. También, era necesario circular con mucha precaución por la Nacional 211, desde Alcolea del Pinar hasta Molina de Aragón, debido a las intensas nevadas que cayeron sobre la zona.
PUERTOS CERRADOS.- El frío llevó la nieve a las carreteras de Avila y Segovia. Se cerraron los puertos de Mijares y Navalmoral. Varios municipios se quedaron sin suministro eléctrico, algunas vías ferroviarias sufrieron cortes y el viento arrastró todo lo que halló a su paso.
La Comunidad Valenciana también se vio ayer envuelta en el episodio de vientos aunque esta vez, a diferencia del registrado el pasado día 29, no hubo que lamentar incidentes destacables.
Los anemómetros controlados por el Centro Meteorológico Territorial de Valencia registraron vientos de hasta 90 kilómetros por hora. en Cocentaina. El incidente más destacable se produjo en la localidad alicantina de Vall d'Ebo, donde la caída de un cable de alta tensión provocó un incendio que arrasó tres hectáreas de matorral.
En Castellón, desde primera hora de la mañana permaneció cortada la CV-140 que une Benicarló con Vinaroz, debido a la acumulación de piedras expulsadas por la fuerza del mar. En el puerto de Santa Pola, la flota pesquera permaneció amarrada en prevención de una posible marejada, si bien fuentes de Salvamento Marítimo informaron que no se registró ningún tipo de incidente.
Andalucía no descansó tras la agitada jornada del miércoles. Las calles de Sevilla y Huelva amanecieron cortadas por numerosos árboles arrancados de cuajo. El Guadiana sufrió una espectacular crecida y se temía un desbordamiento. Su caudal fue constantemente vigilado por la Confederación Hidrográfica del Guadiana.
Dos barcos encallaron en las costas andaluzas: el de la armada de EEUU Ulisses J.P. Bobo en Rota, que ha derramado 300.000 litros de gasóleo, y el Hermano Villalobos, de tipo trainera, en Almería. Al sur de Málaga, un yate se hundió y sus dos tripulantes tuvieron que ser rescatados por un mercante holandés.
Con informaciones de Roberto Mangas (Guadalajara), Javier Borras (Valencia), Antonio Candilejos e Inmaculada Sánchez (Andalucía) y Vidal Arranz (Valladolid).
Facto verídico não gosto de falar disto, mas já que vi este tópico vou deixar o meu relato desse dia.
Vamos lá contar os factos que assisti nesse fim de tarde e início de noite que vivi a caminho de Olhão. Nesse dia fui com o meu pai trabalhar para Ferreira do Alentejo um dia estava nublado, mas sem chuva, por volta das 16 horas o engenheiro da obra avisa-nos que ouviu na rádio que o sul do país vai ser afectado às 20 horas por uma tempestade, na minha memória estava as mortes causadas há uma semana na Ribeira Grande nos Açores, lembro-me de dizer ao meu pai vamos embora, esta é a mesma tempestade que matou nos Açores vamos partir para casa o quanto antes, arrancámos por volta das 17 horas rumo a casa, foi uma viagem penosa, assustadora e arrepiante, não gosto muito de falar sobre isto, até à cidade de Beja apanhámos alguma chuva, fizemos uma pequena paragem numa tasca ao pé de Beja, e a Tv estavam a alertar as pessoas para o temporal que vinha aí, mas que bela sandocha de presunto e de pão caseiro , de volta, antes de Castro Verde começa a chover com alguma intensidade, de Castro Verde a Ourique apanhámos picos de precipitação mesmo mesmo muito muito forte, chegámos a Ourique apanhámos o IC1 directo ao Algarve, começa a chover na zona da Aldeia dos Palheiros de uma forma tão copiosa, tão assustadora, e o vento medonho que pensámos encostamos ou seguimos, eu disse vamos devagarnem que seja a 10 km/h mas vamos, na zona entre Santana da Serra e São Marcos da Serra, vinhamos a 10 km/h não se via palmo à nossa frente, isto eram cerca das 19h45m, lembro-me o meu pai dizer isto vai haver mortos e muita destruição, temos que sair daqui com calma mas ficar aqui será pior, lá viemos lentamente nós e o Autocarro Expresso a caminho do Algarve, sempre a chover copiosamente até à entrada da Via do Infante, a partir do nó de Albufeira até Olhão chovia muito miudinho parecia outro país, como eu costumo dizer depois do "inferno entrámos no paraíso", (tal foi a mudança radical em poucos quilómetros), o vento esse fez estragos em Faro, Olhão e etc, chegámos a casa, lembro-me de ver as notícias e dizerem existem vítimas mortais no Alentejo, lembrou-me logo as palavras do meu pai, nesse dia 12 pessoas perderam a vida num fim de tarde, início de noite mortífera.